¡RELI... ¿QUÉ?!

DIRECCIÓN: Larry Charles
TÍTULO ORIGINAL: Religulous (2008)
PAÍS: Estados Unidos
GUION: Bill Maher
FOTOGRAFÍA: Anthony Hardwick
MÚSICA: Neil Cross
DURACIÓN: 101 minutos

 
       

Juan Carlos Romero Puga | @jcromero

En su libro Mentiras fundamentales de la Iglesia Católica, el investigador español Pepe Rodríguez asegura que "si nos paramos a pensar, nos daremos cuenta de que no sólo tenemos una estructura mental católica para ser creyentes, sino que también la tenemos para ser ateos". Para negar a Dios y la religión —dice— sólo podemos hacerlo desde aquella plataforma que nos lo hizo conocer; por eso "un ateo en nuestro entorno cultural es un ateo católico".

Dirigido por Larry Charles, ¡Reli...¿Qué?! —cuyo nombre original, Religulous, es una combinación de las palabras religión y ridículo— es un documental conducido y basado en una idea del comediante Bill Maher que en una primera instancia exhibe a vividores que se dan la gran vida como ministros religiosos y creyentes que buscan experiencias significativas y emocionales aun en parques temáticos, pero que en otra dimensión hace una crítica innegablemente injusta de lo ridículas que pueden parecer las premisas en las cuales se fundan las grandes religiones semíticas.

De madre judía y de padre católico, Maher realiza una serie de ácidas entrevistas que ciertamente desnudan las patrañas de algunos mercaderes de la fe, pero que también son innecesariamente rudas con algunas personas sinceras, menos favorecidas y menos preparadas para responder de manera más articulada a grandes cuestionamientos sobre lo que creen.

La cinta argumenta inteligentemente contra la pretendida santidad de credos que promueven el odio en distintas formas, intercala valioso material de archivo y segmentos de clásicos cinematográficos para acentuar los absurdos. El conjunto es auténticamente divertido y aunque provocador invita a varias reflexiones. Sin embargo, la edición traiciona la confianza de los entrevistados; la cámara capta expresiones faciales que son aisladas y luego insertadas en el momento justo para crear silencios incómodos y momentos humorísticos durante las charlas.

A final de cuentas. Maher juzga lo incorrecto desde una postura judeocristiana que, al mismo tiempo que lo educó, lo volvió repelente con sus contradicciones a considerar un análisis de Dios a traves de la teodicea que concilia la bondad de éste con el origen del mal y el libre albedrío del ser humano. Religulous adolece de elemental equilibrio, porque aunque entre los testimonios asomen mentes verdaderamente brillantes no se les permite mayor peso.

La película merece una sólida recomendación por su audacia, su férrea oposición a la fe ciega, su valentía para ser impertinente con charlatanes y líderes ufanos, y por su sacrílego sentido del humor. Puede haber tramos cuya pertinencia en el documental puede debatirse (el discurso final en el valle de Armagedón no en favor del escepticismo, sino del fin de las religiones), pero el producto es por lo menos interesante.

 
 
 
 
       

CANAL RSS
YOUTUBE
CONTÁCTANOS


DISTRITO CINE. Los contenidos de este sitio están sujetos a una licencia Creative Commons 2.5, con excepción del material (fotos, imágenes, videos) procedente de terceros.