Juan Carlos Romero Puga | @jcromero

Realizada en conjunto por los equipos de Lucas Film y Cartoon Network, Guerras Clónicas fue concebida como una serie de 20 capítulos con animaciones de poco más de tres minutos cada uno, cuya historia constituye el enlace entre los sucesos de los episodios II y III de la saga de Star Wars.

No obstante, poco antes del estreno de La venganza de los Sith fue estrenada una segunda temporada de cinco capítulos de doce minutos cada uno, lo que extendió el tiempo total de la serie a poco más de dos horas.

La temática se enfoca en el conflicto bélico entre la República, cuyo ejército de clones es liderado por los caballeros Jedi, y el movimiento separatista liderado por el Conde Dooku.

El ex caballero Jedi, además de estar respaldado por la Federación de Comercio y el clan bancario, esta vez aparece asociado con nuevos villanos como el guerrero Durge, cuyas victorias contra la República ocupan tres capítulos.

Asimismo, el señor oscuro de los Sith, Darth Sidius, quien sigue manejando todos los hilos tras la guerra, recluta junto con Dooku a Asajj Ventress, un nueva aprendiz del lado oscuro, para quien la derrota de joven Anakin Skywalker constituye su ascenso a la orden de los Sith.

Esta guerrera, bien entrenada en las artes de los Jedi, maneja dos sables láser y su duelo con Skywalker es definitivo en los acontecimientos de la primera temporada. El combate se desarrolla en el sombrío ambiente de Rattatak, dura cerca de seis minutos y es de lo mejor de la miniserie.

Para el capítulo final de la primera entrega, el público podrá asistir al inicio del exterminio de los Jedi a manos de el general Grievous, un asesino que usa los sables de sus víctimas como trofeos en su cinturón y que prepara el camino al avance de los Sith.

Desafortunadamente, la segunda temporada no es tan brillante. Además del ordenamiento de Anakin Skywalker como caballero Jedi, la incorporación de Obi-Wan Kenobi al Consejo y el secuestro del canciller Palpatine a manos de Grievous pocos acontecimiento son significantes en la continuidad de la historia.

El trabajo de llevar el universo de Star Wars a los dibujos animados quedó a cargo de Genndy Tartakovsky, conocido por series como Samurai Jack, El Laboratorio de Dexter y Las Chicas Superpoderosas.

El encargado de dirigir el diseño de todos los personajes (tanto de los nuevos como de los ya existentes) fue Paul Rudish, director de arte. Si bien muchos seguidores quedaron insatisfechos con el dibujo de los héroes y villanos de la saga, la estética resalta, es interesante y audaz, y hace que el trabajo en conjunto resulte aún más singular.